Senadoras de distintos partidos presentaron iniciativas para que las trabajadores del hogar reciban seguridad social y prestaciones.
Para garantizar los derechos laborales de más de 2 millones 300 mil trabajadoras del hogar, senadoras de diversos partidos presentaron varias reformas a la ley federal del trabajo y del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Durante la presentación de la iniciativa, legisladoras y legisladores se colocaron en el pleno en símobolo de respaldo a la iniciativa presentada por la panista Xóchitl Gálvez, quien destacó algunas de los objetivos.
La iniciativa turnada a las comisiones unidas del Trabajo y Estudios Legislativos, establece que se prohíbe el trabajo de personas menores a 15 años y en caso de adolescentes mayores, sus jornadas no deberán exceder 6 horas diarias y 36 horas semanales. Además, deberán contar con un contrato por escrito que incluya como mínimo dirección de lugar de trabajo, fecha de inicio, duración y término. Así como horario de trabajo, pago de vacaciones, periodos de descanso diario y semanal, suministro de alimentos y alojamiento cuando procedan.
“Esto lo estamos mirando como una prestación, porque anteriormente lo consideraban parte del salario”, destacó la promovente panista Xóchitl Gálvez. Se aclaró que esta propuesta es independientemente de la posibilidad de ratificar el acuerdo 189 de la organización internacional del trabajo, por lo que Gálvez confió en que el presidente Andrés Manuel López Obrador pueda ratificar el convenio y se garantice el trabajo doméstico con contratos por escrito, jornadas establecidas y seguridad social.
Antes, la senadora de Movimiento Ciudadano, Patricia Mercado consideró que esta iniciativa tiene por interés garantizar los derechos para darles la igualdad ante la ley que hasta ahora se les ha negado.
En tanto, Claudia Ruiz Massieu del PRI mencionó que su partido respaldará esta iniciativa que mejoraría las condiciones de vida de más de 2.3 millones de familia. Mientras que, Martha Lucía Micher de Morena, destacó que las trabajadoras domésticas padecen una serie de desigualdades que no se limitan a la falta de acceso a derechos laborales, sino a la invisibilización de algunos temas serios como el acoso sexual o incluso la violación.
Por otra parte, Alejandra Haas, presidenta del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), señaló que las trabajadoras domésticas son víctimas de múltiples expresiones de discriminación estructural.
La senadora del Partido Verde, Alejandra Lagunes indicó que mientras la tasa de informalidad en México alcanza un promedio del 57 por ciento, en el caso del trabajo doméstico llega al 97 por ciento, lo cual demuestra la urgencia de aprobar estas reformas.
