Ciudad de México. Un pequeño grupo de periodistas independientes despidieron el sexenio de Enrique Peña Nieto pasando lista de los reporteros asesinados y desplazados, durante su administración, entre ellos Javier Valdez y Miroslava Breach, corresponsales de La Jornada en Chihuahua y Sinaloa.
Señalaron que antes de que se vaya Peña Nieto quieren recordarle la ola de asesinatos que se cometieron contra el gremio durante estos seis años para que se los lleve en la conciencia.
El pase de lista se realizó en la antigua sede de la Procuraduria General de la República (PGR), en Paseo de La Reforma 211, instalación que quedó inservible después del sismo del 19 de septiembre del años pasado.
En las rejas del lugar colocaron fotos de todos los periodistas asesinados y prendieron velas. Otros cargaban los retratos entre sus manos, mientas gritaban cada uno de los nombres, seguido de la palabra ¡Presente!
Los asistentes recordaron que la agresión contra reporteros no termina y que el periodismo es de las profesiones más peligrosas del país. Del año 2000 a la fecha más de 120 periodistas han sido asesinados en México, 47 en el sexenio de Peña Nieto, y 27 desaparecidos, además de otros 380 fueron desplazados de diferentes estados y municipios por la violencia. Quienes cubren temas relacionados con el narcotráfico o corrupción política son los más vulnerables ha recibir amenazas, agresiones e incluso a ser ejecutados.
Entre los presentes se encontraban colegas quienes han sido relegados por amenazas relacionadas con su labor periodística. Dijeron que muchos tienen miedo de regresar a sus lugares de origen por temor a ser asesinados o desaparecidos.
“Estamos en este inmueble de la PGR que es un cascarón y no sirvió de nada, y que ahora representa lo que siempre fue en todo el sexenio que ha dejado en la impunidad los casos” señaló el reportero gráfico y activista Alejandro Melendrez.
Señalaron que del próximo gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador esperan que se haga justicia y abra los expedientes de los periodistas asesinados para poner fin a la impunidad de los casos ya que no hay avances en las investigaciones.
“Que el nuevo gobierno asuma su resposnabilida, que no simule y haga su trabajo. Tenga la sensibilidad y empatía de platicar con familiares de las víctimas”.
También asistieron la periodista mexicana independiente Marcela Turati. “Este pase de lista es de los compañeros que se quedaron en el camino, pero existen otros que no han aparecido y no figuran en las cifras que las autoridades siempre han manejado porque no los reconocen como compañeros que perdieron la vida realizando su trabajo o en defensa de los derechos humanos”, dijo otro periodista desplazado.
Entre los oradores estuvieron familiares de del fotoperiodista Rubén Espinosa, asesinado en julio de 2015, así como compañeros de Javier Valdez del semanario Ríodoce, donde también fue colaborador del semanario sinaloense.