Ciudad de México- Guillermo Padrés solicitó a los jueces que le instruyen sus dos procesos cesar la prisión preventiva a la que está sometido porque el plazo máximo para mantener a un preso sin sentencia es de dos años y ese término se cumplió el 10 de noviembre para su caso.
El exgobernador de Sonora argumentó en sus escritos que el Código Nacional de Procedimientos Penales (CNPP) establece ese límite para la prisión preventiva, salvo cuando la defensa del imputado prolonga el proceso, lo cual no es su caso.
La petición fue entregada a Guillermo Urbina Tanús, Juez Décimo Segundo de Distrito en Procesos Penales de Ciudad de México, quien instruye el juicio contra Padrés por una presunta defraudación fiscal de 70 millones de pesos.
También, hizo lo propio con Juan Miguel Ortiz Marmolejo, Juez Séptimo de Distrito en Procesos Penales de Toluca, quien juzga a Padrés por un supuesto lavado de 11 millones 186 mil 895 pesos.
Este último acordó por escrito tomar en cuenta la petición en el momento procesal oportuno.
De acuerdo con informes del Poder Judicial de la Federación, el Juez Ortiz Marmolejo celebró la semana pasada la audiencia de sustitución de medidas cautelares solicitada por el ex Mandatario.
En la audiencia, la PGR se opuso a que le sustituyan la prisión preventiva por alguna otra medida cautelar, como puede ser la libertad con un brazalete electrónico, el arraigo domiciliario o la presentación periódica ante el juez, entre otras.
La dependencia argumentó que existe el riesgo de fuga del acusado por estar sujeto a dos procesos penales.