En su momento fue considerado por la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) como uno de los mayores traficantes de droga de América.
Bolivia.- La Policía Boliviana detuvo hoy a Jorge Roca Suárez, considerado uno de los mayores narcotraficantes de Suramérica en la década de 1980, para que comparezca ante un juez que le podría revocar la libertad condicional de la que goza.
Roca Suárez, apodado “Techo’e paja”, fue detenido en el aeropuerto internacional de Viru Viru, en la ciudad oriental de Santa Cruz, a donde arribó proveniente de la región vecina de Beni, informó a los medios el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico (FELCN), Marco Ibáñez.
Los agentes cumplieron de esta forma con un mandamiento de aprehensión del Juzgado Segundo de Ejecución Penal emitido en La Paz, a donde será trasladado Roca en las próximas horas, agregó.
El abogado de Roca, Miguel Zabala, señaló que la explicación que le dieron en la FELCN para la detención de su defendido fue que habría incumplido “algunas medidas” judiciales.
“Ha sido para nosotros sorprendente este tema, siendo que él obtuvo la libertad bajo las normas establecidas y nos deja en un momento incierto”, lamentó Zabala.
Al respecto, alertó de que la vida de Roca “corre peligro” si se le traslada a La Paz, por su edad avanzada, 67 años, y porque padece de problemas cardíacos, de los pulmones y también es asmático.
La Paz está situada a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar, mientras que Santa Cruz está a unos 400 metros de altitud.
Roca fue extraditado en abril pasado desde Estados Unidos, donde fue detenido en diciembre de 1990 y le sentenciaron treinta años y cinco meses de prisión.
Desde entonces cumplió reclusión hasta que la Justicia lo benefició con la reducción de su pena por buen comportamiento y autorizó su traslado a Bolivia.
“Techo’e paja” estuvo en una cárcel de La Paz desde su llegada en abril hasta julio pasado, cuando obtuvo la libertad condicional, si bien las autoridades bolivianas anunciaron que buscarían revocar ese beneficio.
Roca Suárez se convirtió en la década de 1980 en el lugarteniente de su tío Roberto Suárez Gómez, considerado “el rey de la cocaína” de Bolivia.
En su momento fue considerado por la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) como uno de los mayores traficantes de droga de América y jefe de una vasta red de producción y comercialización de cocaína, por la que también fueron a prisión su madre y otros familiares.
