La bancada del PRI en la Cámara de Diputados será la principal damnificada por la redistribución de espacios en San Lázaro. Perderá el primer piso del edificio H y las oficinas que tenía en los edificios B, E, y F.
Es decir, sólo se quedará con la planta baja del edificio H que tendrán que redistribuir entre sus 47 diputados.
Según los cálculos en poder de Morena, cada diputado del tricolor ocupaba, en la legislatura pasada, 106 metros cuadrados frente a 34 metros cuadrados que tenía un legislador de otro partido.
En los espacios perdidos por el tricolor se ubicaban también coordinaciones por estado y de los sectores obrero, popular y campesino.
Morena se quedará el edificio B, pero aceptó dejar en poder del PAN la planta baja, donde se ubica una oficina del coordinador parlamentario y vestigios del llamado SPAN, una especie de gimnasio que el blanquiazul intentó construir ahí hace casi 20 años.
Además de la planta baja del B, el PAN también tendrá el cuarto piso del edificio H.
Los espacios que el PRI tenía en los edificios D, E y F servirán para los diputados de Morena que no obtengan oficinas en el B.
El Verde se quedará con el tercer piso y, en ese mismo edificio habrá oficinas para el PRD, MC y el PT.
Aún está pendiente la distribución de los basamentos de cámara.
El Heraldo de México publicó, el 24 de agosto, que Morena había formalizado ante la Secretaria General de la Cámara de Diputados su petición de ocupar los cuatro pisos del edificio B, lo que implicaría quitarle al PAN la planta baja de ese espacio.
En ese espacio se ubica una oficina del coordinador parlamentario, dos salones de juntas y unos baños con regaderas.
Esas regaderas formaron parte de un gimnasio que los diputados panistas intentaron construir en la 58 Legislatura y que, luego de un escándalo mediático, fue cancelado.
Luego de las negociaciones entre el coordinador de Morena, Mario Delgado, y el del PAN, Juan Carlos Romero Hicks, Morena aceptó dejar en manos del blanquiazul ese espacio en el recinto.