Hermosillo, Sonora, agosto 26 de 2018.- Para evitar enfermedades transmitidas por el mosco Aedes aegypti en Sonora, la Secretaría de Salud realiza la vigilancia epidemiológica de dengue, zika y chikungunya durante todo el año, resaltó Gerardo Álvarez Hernández.
El Director General de Promoción a la Salud y Prevención de Enfermedades explicó que el mosco Aedes aegypti tiene ciertas características que le permiten vivir dentro de los hogares; no puede vivir en agua donde se tenga materia orgánica o con mucha competencia, por lo que prefiere agua limpia.
Estos moscos, agregó, tienen unas rayas blancas en las patas y en el vientre que lo distinguen fácilmente de otra familia de moscos que son los Culex, que a diferencia del mosco Aedes, tienen la capacidad de vivir en agua con materia orgánica como charcos y drenes.
“Este mosquito tiene la capacidad de transmitir, e incluso al mismo tiempo, los virus del dengue, chikungunya y zika, los cuales son albergados en su estómago y se transmiten a través de sus glándulas salivales cuando se alimenta al picar”, explicó Álvarez Hernández.
Esta enfermedad, detalló, es una infección viral que es producida por cuatro diferentes serotipos del mismo virus, que son el Dengue I, II, III y IV, pero, dijo, al ser infectado una vez y para mala fortuna al año siguiente se tiene otro tipo, puntualizó, se incrementa la probabilidad de tener formas severas.
De ahí, enfatizó, la importancia de ir al médico si se tiene dengue, para evitar que el padecimiento se disperse, ya que el paciente tiene la capacidad de que al ser picado por un mosco Aedes infecte y transmita el virus, ya que tiene una capacidad de vuelo de cientos de metros y puede alimentarse varias veces al día.
“El Dengue inicia con malestar general, que implica dolor en el cuerpo y las articulaciones, horas después empieza la fiebre y luego el dolor de cabeza, que se fija casi siempre en la parte frontal que ocasiona dolor en los ojos; si no se atiende, al segundo o tercer día pueden aparecer ronchas rojizas y ásperas en la piel”, comentó.
Pero si no se cuida la persona, indicó, la replicación del virus en el organismo ocasiona deterioro en las venas y capilares, además se daña el hígado, se pierden líquidos y bajan las plaquetas, motivo por el cual no se debe tomar aspirina, ya que se incrementa el riesgo de hemorragias.
