Ciudad de México.- A partir del próximo 1 de diciembre, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) será una oposición crítica, firme y constructiva, afirmó Claudia Ruiz Massieu, presidenta nacional del tricolor.
Precisó que el PRI se enfocará en una agenda para reducir la desigualdad, promover la división de poderes, libertades para todos, generar equilibrios y contrapesos, y defender el sistema federal.
Ruiz Massieu Salinas, entrevistada en la mesa de Despierta con Loret de Televisa, dijo que el partido tricolor debe cambiar la forma de hacer política y comentó que en democracia, la derrotas no son para siempre.
Expuso que al PRI le preocupan los delegados que se planea designar para las entidades, porque podrían ser instancias intermedias entre los gobiernos federal y estatales, por lo que en este caso, los priistas defenderán el federalismo.
“El sistema federal es una decisión política fundamental de los mexicanos, no se puede cambiar con una política pública, vamos a defender el federalismo y la la división de poderes”, indicó.
La dirigente del PRI ratificada hasta agosto de 2019, detalló que uno de los retos que tiene enfrente es mantener la cohesión del PRI, que es un partido histórico que debe transformarse hacia el siglo XXI, y hacer parte a la militancia en el proceso de deliberación interna, mejorar y recuperar el poder.
Indicó que el Revolucionario Institucional ya inició su proceso de deliberación, que durará un año, para reformar al partido, en donde el tema principal es la democracia.
Luego de los resultados obtenidos en la contienda electoral del pasado 1 de julio, dijo que el PRI va a sobrevivir, aunque admitió que fue su peor derrota; sin embargo, subrayó que el partido tiene presencia política y espacios de poder, con gobernadores y legisladores en los congresos locales.
La presidenta priista manifestó que es indiscutible que el PRI tiene que mejorar, puesto que de forma clara la ciudadanía le dijo al partido que no le gustaba su propuesta ni su forma de gobernar, por lo que ahora habrá que cambiar a fondo.
Reiteró que el hecho de que PRI cambie de nombre y colores, no es lo importante, lo relevante es cambiar la forma cómo hacen política y atribuyó el resultado electoral del pasado 1 de julio a todos los priistas, quienes tienen un grado de corresponsabilidad.
Por tal motivo, en estos momentos se hace una valoración de dónde pudieron hacer las cosas mejor para transitar de un partido del siglo XX y vertical, a uno más fluido, horizontal y democrático.