Querétaro.- José Luis Hernández Guerrero, el padre de un joven asesinado hace más de 13 años, le reprochó al candidato presidencial Ricardo Anaya Cortés, que no lo atendiera ni un minuto cuando fue funcionario local.
Anaya Cortés recientemente participó en el “Diálogo por la Paz y la Justicia”, donde se mostró sensible, al afirmar que podía entender que la perdida de un hijo era para toda la vida, así como la importancia de escuchar a las víctimas.
“Ya les dijimos quién es el asesino. Fue señalado directamente como asesino y pues no (hay justicia)”, dijo el señor José Luis, tras acusar que el caso de su hijo lo dejaron tirado.
En su intervención en el “Diálogo por la Paz y la Justicia”, Anaya se mostró preocupado de la inseguridad en todo el país, e inclusive, dijo que estaba a favor de obtener la paz a través de le justicia y cuestionó la impunidad.
El señor José Luis insistió: “Él estaba en el poder, ahora va para presidente de la República, pues yo quisiera ver que me esclarezca un caso que tiene trece años que han tirado al olvido”.
El testigo principal del crimen del joven Marco Antonio, identificó a un rico y poderoso empresario de Querétaro, como quien por un incidente de tránsito, le disparó a su amigo y le puso la pistola a él en la cien.
No obstante, el entonces Procurador y actual Secretario de Gobierno, Juan Martín Granados Torres, determinó en una conferencia en la prensa que no había pruebas en contra del empresario señalado, Federico Ruíz Lomelí.
Del asesino de Marco Antonio, el entonces Procurador no informó nada y el caso ni siquiera se presentó a un juez para que determinara las pruebas, por lo que continúa en la impunidad.
“En mi caso, no sé por qué, cuando él estuvo como secretario particular del licenciado Garrido ¿Por qué no intervino en mi caso”, preguntó a Anaya el señor José Luis.
En aquellos años, policías dijeron a este reportero que el empresario señalado por el testigo principal del crimen, fue detenido cerca del lugar en una camioneta de características similares, pero recibieron la orden de liberarlo.
“Aquí el dinero y el poder manda; yo, desafortunadamente, no tengo dinero”, lamenta José Luis, padre de la víctima, quien recordó que el actual gobernador, Francisco Domínguez, le prometió en campaña que resolvería su caso y ahora ya ni siquiera lo recibe.
Durante su participación con víctimas, Anaya también habló del incremento en el número de homicidios dolosos, al respecto, el señor José Luis le cuestionó que si los casos no son atendidos las cifras continuarán a la alza.
Hernández Guerrero recordó también que habló con quien fue Secretario de Gobierno, cuando ocurrió el crimen de su hijo, Alfredo Botello Montes, quien hasta hace unas semanas era Secretario de Educación.
Relató que el funcionario le prometió apoyarlo pero como ahora va de suplente para senador, con el candidato del Frente, Mauricio Kuri González, de nueva cuenta aplazaron su caso hasta después de las elecciones.
“Ellos pues no, no se molestan, pasan su tiempo en el poder y ahí se lavan las manos”, expresa indignado José Luis Hernández Guerrero, sobre la falta de apoyo por parte de Ricardo Anaya, Francisco Domínguez, Alfredo Botello y otro políticos queretanos.
El padre de Marco Antonio duda que la preocupación que manifiesta el candidato Anaya Cortés sea genuina, porque insiste en que él, cuando fue funcionario de gobierno, pudo tenderle la mano y no lo hizo.
“Aquí en su estado hay un caso muy específico, el cual él conoce perfectamente bien, pues vamos empezando a atacar ese asunto para ver si cierto que están preocupados”, puntualizó Hernández Guerrero.