El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Sonora trabaja con acciones de promoción y prevención para erradicar el consumo de tabaco en consumidores cuyas edades van desde los 15 hasta los 45 años de edad, que en algunos casos avanzan y entran al mundo de las drogas.
La Trabajadora Social y Promotora de Salud de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 2 en Hermosillo, Diana García Martínez, aseguró que la mayoría de las personas no saben cómo pueden prevenir cáncer y tampoco los riesgos.
“Los mayores fumadores son hombres, en un 65 por ciento y las edades oscilan entre 15 a 45, inclusive hasta adultos mayores nos dicen que sí fuman y hasta consumen drogas”, detalló y aseveró que del 100 por ciento de las atenciones dadas, el 10 por ciento corresponde a menores de edad.
Explicó que además de cáncer de pulmón, el fumar provoca enfermedades como cáncer de faringe, laringe, boca, lengua, piel y enfermedades cardiorrespiratorias y aunque apenas un 60 por ciento reduce su hábito, se ha logrado que el consumo baje de tres a una cajetilla diaria de cigarros en un periodo de cinco a siete meses.
Comentó que hay casos de adultos mayores que han admitido que después de fumar, deciden tomar un puro, lo que les afecta más y para evitar mayores daños a su salud se promueve el programa ‘Envejecimiento Saludable’ y se suman ‘Ella y Él’ para adultos jóvenes; ‘Yo Puedo’, destinado a personas con diabetes, obesidad o hipertensión.
Recordó que el Seguro Social promueve el programa JuvenIMSS en las escuelas de preparatoria y secundaria, instalaciones en las que han visto muchos fumadores al detectar hasta tres casos por cada aula con un promedio de 40 a 45 alumnos.
“Hemos visto que hay mucha variación, antes se veía más en la preparatoria, como que por ser más grandes tenían mayor libertad, ahora está ya la balanza igual entre prepa y secundaria”, afirmó Diana García Martínez.
Aclaró que aunque muchos han optado por usar el cigarro electrónico, no está científicamente comprobado que ese aparato ayude a las personas a dejar de fumar y solo se trata de un placebo.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, existen dos millones de muertes por enfermedades cardiovasculares al año y al frenar su consumo se pueden prevenir millones de muertes por infartos al miocardio, además de accidentes cardiovasculares y cerebrales.
El tabaco representa 12 por ciento de las muertes de adultos en el mundo y el 14 por ciento de fallecimientos por enfermedades no transmisibles, incluidas las cardiopatías, el cáncer, la diabetes y las neumopatías.
Destaca, en su informe 2017 que el tabaco mata prematuramente ya que los consumidores de tabaco pierden un promedio de 15 años de vida y cerca de la mitad de los fumadores fallecerán por causas relacionadas con este producto.
El consumo de tabaco también tiene costos indirectos, como la pérdida de productividad debida a las enfermedades y las muertes prematuras, que asciende a un billón de dólares al año, además que lo residuos de ese producto contienen más de siete mil sustancias tóxicas, algunas cancerígenas para el ser humano.