El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Sonora asegura que el llevar un estilo de vida saludable tanto en jóvenes, como adultos, además de cuidarse en sus empleos, lleva a que los síntomas del asma estén controlados.
El Inmunólogo Clínico y Alergólogo, Hugo Azuara Trujillo dijo que Sonora mantiene una estadística del 10 al 12 por ciento de la población en general que sufre esa enfermedad, aunque en el caso de Hermosillo el porcentaje se reduce a 8 por ciento.
“Si es un paciente que hace ejercicio, que come saludable, evita fumar, no está expuesto a un factor específico ambiental, están libres de síntomas”, comentó el especialista en el marco del 1 de mayo, Día Mundial del Asma.
Abundó que también está el Asma Ocupacional que se da en empleados de maquiladoras y están expuestos a ácidos, soldadura y sustancias químicas que afectan sus vías.
El especialista informó que los síntomas se presentan en menores de edad de 3 a 5 años de edad, que ven reducido el mal conforme cambian sus factores hormonales y sistema inmunológico se regula, pero sufren recaídas al llevar un estilo de vida no saludable con el consumo de cigarros o sufrir aspectos de obesidad.
Dijo que las complicaciones son en pacientes que frecuentemente se sobre infectan, les da bronquitis aguda, neumonías, aunque con buen tratamiento se puede revertir el daño a vías respiratorias.
El médico especialista puntualizó la existencia del Síndrome por Entrecruzamiento Asma-EPOC, que afecta a personas que se no se cuidaron bien a lo largo de su vida y ya en sus 55 años de edad presenta enfermedades crónicas y evitan que su respiración se presente al 100 por ciento.
“EPOC y asma son enfermedades pulmonares crónicas, pero la segunda mencionada se revierte con medicamentos y la primera en cuestión no se revierte por si sola o con medicación; es muy difícil que se logre llegar a la normalidad y eso se puede medir con el estudio de espirometría”, explicó.
Recordó que hace dos años la Universidad de Sonora detalló que en el medio ambiente de Hermosillo se hallaron restos de cemento, minerales y pesticidas, lo que ha propiciado la aparición de problemas respiratorios, alergias y asma.
También indicó que el Instituto de Química del IMSS realizó un estudio durante el 2010 en la Ciudad de México y se encontró partículas de diésel suspendidas en el medio ambiente, sustancia que con dificultad se depura en las vías respiratorias y lleva a que se le peguen hongos, bacterias, alérgenos, lo que representa mayor exposición al organismo.
