En la audiencia se informó que fue declarado en bancarrota hace varios años
Vestido con el uniforme naranja de los reos y aspecto demacrado, Loaiza se estremeció al ver entre los asistentes a sus padres, hermanos y su hijo, quienes estallaron en llanto al verlo llegar.
En la audiencia, de casi media hora, la jueza dispuso que Loaiza deberá pagar además de la fianza el uso de un grillete electrónico, presentar un domicilio y un compromiso para obtener empleo.
Loaiza, a quien se decomisó más de 20 kilogramos de cocaína ocultos en un compartimiento en su auto, fue inicialmente presentado a la justicia local, pero el juez decidió canalizarlo ante una corte federal.
Según las fuentes, la fianza será pagada por la ex esposa de Loaiza, Ashley Espósito, quien reside en Texas y se dedica al negocio de la joyería, a fin de garantizar que la suma no provenga de negocios irregulares.
Abogados consultados señalaron que la libertad bajo fianza de Loaiza podría tardar dos o tres días, mientras se cumplen los procedimientos del depósito, así como la renta del brazalete electrónico, y según fuentes judiciales, podría vivir luego con su hermana, radicada en el área de San Diego.
Aunque Loaiza ganó más de 40 millones de dólares como jugador profesional de beisbol, en la audiencia se informó que fue declarado en bancarrota hace varios años.
El fiscal federal Jered Hodes señaló que los cargos de narcotráfico y posesión de más de cinco kilogramos de cocaína con intención de distribuir son los más graves que enfrentará Loaiza, cuya próxima audiencia fue programada para abril próximo.