A pesar de los miles de millones de pesos destinados para la seguridad en la última década.
Al inaugurar la Segunda Conferencia Internacional Seguridad y Justicia en Democracia: Hacia una Política de Estado Centrada en los Derechos Humanos, González Pérez destacó que esta situación se ha dado a pesar de los miles de millones de pesos destinados para la seguridad en la última década.
“Sin seguridad, jamás habrá una vigencia real de los derechos humanos; y sin respeto a estos derechos, las medidas de seguridad que se adopten no podrán ser aceptables, por ser autoritarias”, sentenció.
“Este entorno de inseguridad, violencia e impunidad que se vive, con especial gravedad en diversas regiones del país, es una expresión clara de que el Estado mexicano ha fracasado en su función básica de procurar la protección de la vida, integridad y bienes de quienes habitamos este país”.
Tachó de falaces los señalamientos que acusan que, por el respeto a los derechos humanos, no se aplica la ley y reprochó que más allá de los discursos oficiales la realidad indica que las estrategias de seguridad actuales son eminentemente reactivas y han dejado de lado la prevención.
Para el titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) el reto que subyace es abatir la impunidad y la corrupción.
“La corrupción no es una culta, es una costumbre que debemos cambiar y erradicar de México”, dijo. En 2014, en un discurso ante “Los 300 líderes más influyentes de México”, el presidente Enrique Peña Nieto señaló que la corrupción es una debilidad de orden cultural en el país.
En tanto, Enrique Graue, rector de la UNAM, señaló que la seguridad pública y los derechos humanos son inseparables; coincidió en que la seguridad sigue siendo un pendiente del Estado.
“Nuestro país presenta desapariciones forzadas, ejecuciones, abusos de las Fuerzas Armadas, prácticas sistemáticas de tortura y tortura sexual, amedrentación, y, por supuesto, las distintas facetas de la violencia de género”, resumió.
Recordó que en 2011 realizaron la primera edición de este foro y en aquella ocasión, al igual que lo harán ahora, entregaron las conclusiones a los aspirantes presidenciales.
“Esperemos que los resultados de este encuentro incidan positivamente en las políticas que habrán de implementarse para abatir los índices de violencia”, confió el rector.
LEY, UN RIESGO
En este contexto, ambos funcionarios criticaron la aprobación de la Ley de Seguridad Interior por representar un riesgo a los derechos humanos de los mexicanos.