Lleva el bolero en el cuerpo desde hace casi cuatro décadas. Es la primera vez que el cantante jarocho visita Álamos, Sonora, donde se presentará en el escenario de la Plaza de Armas para deleitar a quienes visitan el Festival Alfonso Ortiz Tirado 2018.
“Estoy preparado para entregar, como siempre, mi canto, mi corazón y mi pensamiento en esta noche tan especial”, expresó el rey del bolero.
En charla con la prensa, Cuevas compartió que fue gracias a su padre, gran admirador la ópera, que conoció la música del doctor y tenor Alfonso Ortiz Tirado: “Qué remembranza para mí el venir a un festival que está dedicado a él, y más con grandes figuras que acompañan la cartelera. Es muy gratificante que me hagan el favor de invitarme”, agradeció.
Boleros de siempre, boleros nuevos, clásicos, sin deformar su esencia, pero con un toque contemporáneo, además de sumar uno que otro inédito, son los temas que conforman el show del cantante.
Con el lanzamiento de nuevo material discográfico en puerta, el maestro Cuevas reveló que será una producción dedicada a los Boleros de oro de la música tropical, con temas famosos de la famosa Sonora Matancera, grabado en conjunto con la Orquesta Cubana. El disco, que saldrá a partir del próximo 14 de febrero, incluye además la colaboración de cinco artistas, entre ellos la cantautora Lila Downs, quien también estará presente en esta trigésima cuarta edición del FAOT.
El rey del bolero también llevará su concierto a Nacozari, municipio que en esta edición 34 se une como subsede del FAOT, presentación que se llevará a cabo del día martes 23 de enero, en la Plaza Jesús García en punto de las 19:00 horas.
Mientras exista una pareja de enamorados, existirá el bolero, y para cantarlo, Carlos Cuevas
Ya por la noche, y al subir al escenario, el recibimiento del público es cálido, a pesar de que la noche no lo sea tanto. Cuevas dice que solo Veracruz y Álamos son bellos, ciudad de los portales que vio crecer al gran médico y tenor que fue Ortiz Tirado, así como a la maravillosa actriz, ‘La doña’, María Félix: “Por eso veo tanta joven y tanta mujer guapísima esta noche”.
“Voy a recordar, en este marco tan precioso, al último baluarte del romanticismo en México. De Yucatán para el mundo. Una de las canciones más bellas que ha compuesto don Armando Manzanero” anunció el bolerista, para dar paso a Contigo aprendí.
Piel canela [Me importas tú y tú y tú, y nadie más que tú…], Sabor a mí, Novia mía, Perfume de Gardenias, fueron algunas de las melodías más coreadas durante la velada.
En medio, un grupo de muchachas ya no tan jóvenes, mueven las cabezas de un lado a otro; y digo las cabezas, pues a diferencia de los días anteriores, el foro se ha acondicionado con sillas para el público, como si un buen bolero no se pudiera disfrutar bailando.
Mientras interpretaba Reloj, el rey del bolero baja del escenario a cantarle al FAOT. Tras caminar y saludar al público, Cuevas se detiene frente a una pareja, y de su bolsillo, extrae una pequeña caja que entrega a la chica espectadora. El público se levanta, aplaude, partícipe de la emotiva entrega de anillo de compromiso. Esa es quizá la parte cumbre que mantuvo a la audiencia fuera de sus asientos por algunos minutos.
Hasta las escalinatas, al costado del Templo, espectadores disfrutan el recital, que Cuevas cierra con un medley de la Sonora Santanera, hasta El Sinaloense y El viajero, de Luis Miguel. “Mientras exista una pareja de enamorados, existirá el bolero, y para cantarlo, Carlos Cuevas”, concluyó.
