VILLAHERMOSA, Tab.- La secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Claudia Ruiz Massieu, rechazó que José Antonio Meade vaya a ser sustituido como candidato presidencial, y acusó a los adversarios políticos de esparcir ese rumor para “confundir”.
De visita en Tabasco para apoyar a la precandidata única a la gubernatura, Georgina Trujillo Zentella, la lideresa priista aseguró que el 18 de febrero la Convención de Delegados ratificará a Meade Kuribreña como candidato presidencial, porque los mexicanos quieren “certidumbre y seriedad”.
“Somos un partido que se sabe adaptar a las necesidades del país en cada momento y coyuntura; entendimos en este proceso de transformación que era importante abrirnos a la ciudadanía”, apuntó.
Y añadió que ante los nuevos retos por las “decisiones responsables y difíciles” tomadas por el gobierno de la República, si Meade Kuribreña gana la elección de julio próximo, daría continuidad al trabajo del presidente Enrique Peña Nieto.
“Pepe Meade encabeza una precandidatura en la cual ha convocado a todo el priismo y en la que estamos trabajando todos y sumando, a partir de las diferentes realidades regionales”, manifestó.
Luego de adelantar que en los primeros días de febrero Meade estará en Tabasco, Ruiz Massieu señaló que en el ámbito local el gobierno perredista de Arturo Núñez “quedó a deber” a los tabasqueños por la inseguridad y desempleo que vive la entidad, por lo que, subrayó, ahora tienen la oportunidad de elegir a alguien “con experiencia”, como Georgina Trujillo.
Indicó que las expectativas de triunfo para regresar a la Quinta Grijalva, casa de gobierno, se basa en los 440 mil votos que el excandidato priista y ahora aspirante independiente, Jesús Alí de la Torre, obtuvo en 2012, mediante un ejercicio de escuchar e incorporar diversos grupos políticos.
Sin embargo, la desbandada priista no tiene freno desde el “destape” de Gina Trujillo, en diciembre pasado.
El lunes 15 renunció al partido el exdirigente estatal José Antonio Aysa Bernat, luego de 52 años de militancia y después de presidir la Comisión de Ética Partidaria hasta ese día.
Su dimisión se sumó a la de cuadros y líderes de varios municipios que se han unido a otros partidos como Morena y el PVEM.
Ruiz Massieu dijo también que en el PRI han visto con “enojo y pena” la corrupción de exgobernadores como Andrés Granier Melo, que fallaron a la ciudadanía y al partido, lo que es necesario “corregir”.